En algunas partes del mundo, comer chiles (ajíes, pimientos) picantes es una costumbre sumamente extendida. Seguramente muchos paladares occidentales no están tan preparados para esta clase de picor, pero es cuestión de agarrarle la vuelta y empezar a disfrutarlos sin igual. Los jalapeños (una de las tantísimas variedades del pimiento base Capsicum Annum), sin duda alguna, son de los más interesantes que existen dentro de los de su clase.
El chile jalapeños es de origen mexicano, más precisamente la región de Xalapa. Tiene por particularidad ser muy carnoso y picante a la vez, por lo cual se emplea muchísimo en salsas, condimentos y todo tipo de comidas. Su color verde o rojo depende del grado de maduración que tengan. Son muy populares en México, pero también en Estados Unidos y buena parte del resto del mundo, ya que forman parte de comidas más que tradicionales que han llegado a todas partes. Además, como todo pimiento, tienen propiedades medicinales más que interesantes.
¿Te gustaría tenerlos en tu hogar? Eso no será ningún problema. Consigue algunas semillas y comienza a plantarlos sin problema alguno. ¡Aprende a continuación como cultivar chile jalapeño!
Esto es realmente muy sencillo, ya que no tienes más que poner a germinar tus semillas (si tienes una bandeja de semillas, pues mucho mejor) en interiores, siempre tratando de que estén en un lugar bien cálido y donde reciban luz. Puede que te tome un tiempo, pero una vez que las semillas estén lo suficientemente brotadas y empiecen a mostrar algunas hojas, las podrás pasar a tierra.
Una vez que estén en tierra, consecuentemente separadas las unas de las otras, no tienes más que seguir con la misma mecánica: agua y abundante luz solar. Por eso mismo, la primavera suele ser el momento ideal para plantarlos. Una vez que empiecen a crecer, sigues manteniendo el riego y la luz.
Lo más conveniente para que los jalapeños crezcan sanos y fuertes es tener un suelo nitrogenado. Por eso mismo, aplicarle un poco de compost a tu planta de chile jalapeño no le vendrá para nada mal a los frutos. Luego, será cuestión de tener paciencia, ya que desde que las plantas están creciendo hasta obtener tus frutos, pueden llegar a pasar hasta 3 meses. El mejor indicativo de que viene el chile o pimiento, es cuando empiezan a salir algunas flores de la planta.
Para cosechar los chiles, dependerá de tu gusto. Verdes, son más bien de un picante intermedio. A medida que se vayan enrojeciendo, su picor aumentará considerablemente. También aquí encontrarás algunos consejos complementarios para plantar pimiento picante, aunque no jalapeño.
Por más que algunas personas con sensibilidad estomacal no puedan consumirlos, los picantes, a aquellos que no les caen mal, pueden ir de maravillas para muchas cosas de salud.
Conoce más acerca de las propiedades de los picantes, y de otros «parientes» como lo pueden ser la pimienta de cayena y el chile chipotle.
Puedes incorporarlo crudo, en ensaladas, salsas y cualquier tipo de preparación que te parezca que amerite su uso. También, por supuesto, van de maravillas con cualquier comida mexicana o simplemente especiada. Pueden ir en guisados y salsas calientes sin problemas. La clave, quizás, esté en sus semillas y nervaduras. Si no te gusta tan intenso, pues no uses sus semillas, que pueden llegar a resultar el diablo en tu lengua. Caso contrario, no temas a incorporarlas, aunque siempre con precaución.
Ahora ya sabes bien qué son los jalapeños y también como cultivar estos chiles a partir de las semillas. ¿Por qué no intentar entonces con algún otro cultivo hogareño que puedas tener hasta en una maceta? A ver qué te parecen estas opciones.