¿Cómo cultivar amaranto en tu casa?

El amaranto es una semilla con muchas propiedades nutricionales y medicinales que puedes tenerlo al alcance de tu mano, cultivándolo en tu propia casa. ¿Cómo? En este artículo encontrarás la forma de lograrlo, y obtener un alimento nutritivo y saludable.

En los últimos tiempos se ha observado un crecimiento en la investigación de ciertas semillas de origen americano que, se consumían en la antigüedad por los nutrientes que aportan y por sus propiedades terapeúticas. Uno de estos cereales es el amaranto, con él puedes preparar un sinfín de preparaciones o incluso utilizar sus germinados que aportan todos sus beneficios más potenciados.

Si te interesan las huertas orgánicas y la alimentación sana, no puedes perderte la oportunidad de cultivar amaranto tu mismo y tenerlo al alcance de tu mano.

Existen diferentes variedades de semillas de amaranto. Existe una variedad de ciclo corto (de 60 a 100 días) como la Golden Giant se sugiere sembrar en temporada cálida.

¿Cómo cultivar amaranto en tu casa?

• En primer lugar consigue las semillas sugeridas y prepara un almacigo de 7.5 cm de profundidad. Luego, siembra, al voleo, dichas semillas.
• Cuando las hojas de las semillas comienzan a crecer y están los suficientemente grandes para manejarlas con comodidad, trasplántalas a otro almacigo de la misma profundidad pero a una distancia de 4 a 5 cm entre cada una.
• Cuando la planta alcance unos 5 cm de altura, vuelve a transplantar a un nuevo almacigo con una distancia de medio metro.
• A mediados o fines del verano aparecen las espigas coloridas, frótalas y si las semillas se desprenden es el momento de suspender el riego.
• Deja pasar 3 días y coséchalas, tras ello corta los tallos cercanos al suelo, ponlos boca abajo en una funda y cuélgalos a secar.
• Cuando las espigas estén bien secas, quita las semillas y colócalas en una cubeta o recipiente seco.

Con este procedimiento ya tienes a mano las semillas de amaranto, que puedes utilizar para cocinar comidas saludables y nutritivas. Incluso, con la planta de amaranto puedes preparar una leche vegana y preparar licuados y/o batidos.