Propiedades de la moringa

Si no has escuchado hablar todavía de la moringa, seguramente te estás perdiendo una planta medicinal con propiedades que todavía pueden ir más allá de lo conocido. Pero puedes comenzar a acercarte a ella a través de este artículo.

Seguramente ya has escuchado hablar de la moringa en estos últimos tiempos. Este fruto, que es muy popular en determinadas zonas del globo como la India, algunas partes de África y otras del Caribe como Cuba, se ha vuelto cada vez más requerido para los amantes de las propiedades de las plantas medicinales. Es que, justamente, esta planta tendría increíbles beneficios para todo aquel que la consuma.

La Moringa Oleifera, tal su nombre científico, se ha convertido en una planta muy alabada por sus propiedades medicinales. Es que es realmente una auténtica fuente de ellas, contando con beneficios muy diversos y nutrientes esenciales para el organismo. Conoce más acerca de ella en este artículo.

Estas son las principales propiedades de la moringa:

• Beneficios nutricionales: Contiene una gran cantidad de aminoácidos esenciales, es rica en hierro, en calcio, en potasio y en antioxidantes. También tiene proteínas, vitamina A, vitamina C, entre muchos otros nutrientes.
• Buena para perder peso y para el colesterol alto: La moringa, sin duda alguna, encuentra en las dietas un lugar donde ayudar. Es que, por un lado, tiene propiedades depurativas y digestivas, ayudando a combatir el estreñimiento. Por el otro, es antioxidante y rica en ácidos grasos Omega 3. Por ende, sirve para adelgazar y también para combatir la hipercolesterolemia.
• Otras propiedades más: Se considera a la moringa como una planta ideal para fortalecer el sistema inmunológico, es buenísima contra las enfermedades de la piel, es hipoglucemiante, ayuda al hígado, buena para las articulaciones y se estima que muchas otras cosas más. La moringa no tiene techo, momentáneamente.
• Variedad de usos: La moringa se emplea de formas realmente diversas. Se usan sus hojas, sus frutos, su corteza y también se consigue en comprimidos, extractos y otras presentaciones medicinales. De sus semillas, por ejemplo, se extrae el aceite. Y no sería raro que las formas se vayan diversificando cada vez más con el correr del tiempo.