El cultivo del ajenjo debe realizarse en zonas que reciban la mayor cantidad de radiación solar durante el día, ya que mientras más energía solar disponible tenga esta planta mejor es su crecimiento.
Esta planta puede ser cultivada en varios tipos de climas, sin embargo se desarrolla muy bien en climas templados y mediterráneos. El ajenjo resiste de buena manera las heladas, por lo tanto es posible realizar su cultivo en lugares donde el invierno presente habitualmente temperaturas cercanas a los 0 grados Celsius.
El cultivo de esta planta puede iniciarse a través de la siembra de semillas, sin embargo demora bastante en crecer. Otra técnica muy utilizada para la multiplicación de esta planta es la siembra de esquejes.
Los esquejes deben ser ramitas de unos 15 centímetros a las cuales debemos quitarle todas las hojas y plantarlos de forma diagonal, para que no pierda rápidamente la savia.