El ajonjolí es una planta que resiste de buena forma a la sequía, por lo cual puede sembrarse en zonas escasas precipitaciones. Sin embargo esta planta no soporta las temperaturas mínimas. El ajonjolí no crece en lugares donde las temperaturas promedio al día sean inferiores a los 20 grados Celsius.
El cultivo de esta planta se realiza especialmente por las semillas, las cuales tienen excelentes propiedades medicinales y nutritivas.
Si el cultivo del ajonjolí se realiza en surcos, es necesario que exista una separación de al menos 70 centímetros entre cada uno de ellos. Entre cada individuo de ajonjolí plantado debe existir un espacio de unos 50 centímetros, ya que el sésamo es una planta que puede alcanzar alturas cercanas a los 2 metros.
El ajonjolí necesita de abundante humedad para la germinación de la semilla, por lo tanto es importante que la siembra se realice durante la estación mas lluviosa o se riegue de manera abundante.
