Cultivo de orégano

El orégano, cuyo nombre científico es Origanum vulgare, es una planta herbácea bianual, ya que todo su ciclo de vida lo desarrolla durante dos años. Esta planta crece de muy buena forma en climas que no sean muy secos. El orégano prefiere los suelos ricos en materia orgánica, además que no se encuentren compactados y que presenten un buen drenaje.

Es una planta que resiste muy bien las heladas, debido a esto es posible cultivarlo hasta los 2500 metros sobre el nivel del mar. Sin embargo, las mejores condiciones para su cultivo son las que provee el clima mediterráneo en bajas altitudes.

La planta del orégano puede multiplicarse mediante la siembra de semillas o por separación de un individuo adulto en varias matas. El proceso de germinación de la semilla ocurre con temperaturas elevadas y con varias horas de luminosidad, por lo cual es ideal sembrarlas en los últimos días de la primavera y durante el verano. La multiplicación mediante separación de individuos se debe realizar durante el fin del otoño y comienzo de la primavera.

Si se plantan varias hileras de orégano, estas deben estar separadas por al menos unos 30 centímetros, la separación que debe existir entre cada individuo de orégano fluctúa entre los 15 y 25 centímetros.