Para la preparación de las infusiones de manzano se requiere de una cucharada y media de hojas y flores secas, un litro de agua y miel para endulzar.
El método para la realización de la infusión consiste en hervir el litro de agua en conjunto con las hojas y las flores secas durante 5 minutos. Posteriormente se deja reposar, y luego se cuela.
El consumo de estas infusiones es aconsejable para las personas que padecen de hipertensión, ya que esta infusión tiene un efecto que ayuda a bajar la presión arterial.
Las infusiones de flores de manzano ayudan a reducir el aumento de la temperatura corporal producto de alguna enfermedad. Además, es muy útil para tratar diversas enfermedades de tipo respiratorio.
La dosis recomendada va a depender del fin terapéutico que se espera, sin embargo, se aconseja beber como máximo 3 tazas diarias.