Existen muchas plantas medicinales con propiedades venotónicas, como por ejemplo la planta de rusco. Esta posee flavonoides, ácido ascórbico y hesperidina, compuestos que no sólo mejoran la circulación de la sangre, sino que fortalecen las paredes de las venas. De acuerdo a diferentes estudios, se ha comprobado que estas sustancias son efectivas para tratar la insuficiencia venosa.
Por otro lado el rusco tiene propiedades diuréticas que logran eliminar las toxinas del organismo y reducir la retención de líquidos, que pueden perjudicar y complicar el problema de las varices.
Una de las formas de sacar provecho de las propiedades de la planta de rusco, es a través de su infusión; colocando 30 gr. de raíz de rusco seca en 1 litro de agua. Dejar hervir y reposar por 15 minutos. Colar y beber entre 2 a 3 tazas por día.
Por otra parte, otra forma de reducir la inflamación y pesadez de las piernas a causa de las varices, es a través de la aplicación de una compresa del té de rusco a temperatura ambiente.
Para preparar bien esta compresa, embeber una tela de algodón con té de rusco y envolver las piernas. Dejarla actuar por 15 minutos.
Si lo deseas, puedes combinar ambos remedios naturales a base de rusco; y así complementar el tratamiento de las varices.