Cultivo de lúpulo

El cultivo de la planta del lúpulo, conocida también como lupina o lupo, cuyo nombre científico es Humulus lupulus, se da de excelente manera en climas fríos y húmedos, ya que es originaria de la zona europea, que presenta estos climas.

La planta del lúpulo puede reproducirse tanto a partir de semillas como por medio del transplante de esquejes (pequeñas ramas de un individuo adulto). Si se siembran las semillas lo ideal es hacerlo durante los meses de primavera y preferentemente partir el cultivo realizando la siembra en almácigos y en invernaderos, para poder proteger de mejor manera los individuos pequeños. El lugar ideal para sembrar el lúpulo debería presentar alternancia de radiación directa y sombra durante el día.

El lúpulo resiste muy bien las situaciones de frío, por lo cual el cultivo de esta especie es posible en lugares donde las temperaturas mínimas sean extremas. Sin embargo, debe cultivarse en zonas donde las temperaturas máximas superen los 16 grados Celsius.

El lúpulo crece muy bien en suelos profundos que presenten un buen drenaje, la planta del lúpulo presenta dos tipos de raíces, una bien profunda y gruesa, y otro sistema superficial y con raíces fasciculadas, por lo cual un suelo profundo le brindaría mayores beneficios para su crecimiento.