Cultivo de berro

La planta de berro, también conocida como berro de agua o berro amargo, crece habitualmente en los costados de los riachuelos. Es una planta categorizada como semiacuática, ya que en algunas ocasiones sus tallos y hojas se encuentran sobre los cursos de agua superficial.

Para el cultivo de esta planta es necesario proveer de un sustrato (suelo) muy especial, este debe ser en extremo húmedo. El berro, cuyo nombre científico es Nasturtium officinale, crece de manera óptima en suelos que se mantienen constantemente húmedos, por lo tanto se recomienda cultivarlo en zonas cercanas a algún cuerpo de agua o proveerle de un riego abundante.

El berro puede ser reproducido a partir de semillas o multiplicado por esquejes. Se recomienda cultivarlo a partir de esquejes, ya que para que ocurra la germinación de la semilla deben asignársele una gran cantidad de cuidados.

Los esquejes tienen que ser de aproximadamente 15 centímetros de largo, estos deben ser plantados con una separación de 20 centímetros entre cada planta y si es cultivado en más de una hilera, estas deben estar separadas por al menos 10 centímetros.

Cuando las nuevas plantas hayan crecido hasta los 20-25 centímetros y hayan surgido las primeras hojas, es necesario inundar con abundante agua la zona donde se encuentra el cultivo.