Seguramente ya conoces muchos de los beneficios que produce el consumo de todas las variedades de té en tu organismo, pero tal vez no sabes todos los aportes que esta infusión puede darle a tus plantas. ¿Cómo? Utilizando las bolsitas o saquitos de té usadas como suplemento vegetal para tus cultivos hogareños, tanto de interior como de exterior.
El té contiene unos compuestos denominados taninos, que se distinguen por ser sumamente astringentes y de sabor amargo. Los taninos funcionan como protección contra ataques exteriores, siendo tóxicos para los microorganismos que puedan atacar tus plantas y evitando que animales herbívoros las lastimen, ya que su sabor les resulta muy molesto.
Una forma simple y efectiva de aprovechar al máximo el poder de los taninos es dejando secar al sol, en lo posible, los saquitos o bolsitas de té ya utilizados. Una vez completamente secos, desintégralos con tu mano y aplica directamente a en la tierra. También puedes complementar el té con un aporte de hierro, que es necesario para tener unas plantas sanas. Es que muchas veces, este mineral no es absorbido plenamente por los cultivos, debido al calcio presente en el suelo.
Hay dos formas para el aporte de hierro a las plantas:
Un poco de té y un poco de hierro pueden hacer la diferencia, siempre juntos, a la hora de mantener tus cultivos fuertes, por un lado, y protegidos, por el otro. ¿Vas a dejar de probarlo?
