La garra del diablo es una hierba originaria de África, específicamente de las regiones más secas. Su nombre botánico es Harpagophytum (harpagófito), que significa “planta del gancho” en griego. Su etimología proviene de su apariencia, ya que sus frutos parecen garras o ganchos. No temas por su relación con el diablo, no tienen nada que ver. El harpagófito tiene varios beneficios.
Principalmente está recomendada para dolores articulares, artritis, gota, tendiditis, pero también para trastornos digestivos, pérdida del apetito, dolores de cabeza, alergias y problemas en la vejiga y riñones.
La principal razón por la cual funciona para solucionar tantos problemas es que la garra del diablo contiene sustancias químicas que ayudan a disminuir la inflamación, reduciendo el dolor. Varios ensayos clínicos no sólo comprueban esta propiedad, sino que también demostraron que actúa como análgesico.
Algunos estudios han demostrado que la garra del diablo podría aliviar dolores de espalda y cadera en 10 días. Por otra parte también es reconocido como depurativo, durético y desintoxicante. Todo esto hace de la garra del diablo un remedio natural completo y que podría suplantar el ibuprofeno y otros similares. Estos medicamentos, al ser de venta libre, muchas veces se convierten en una solución rápida para dolores comunes, lo que puede traer sus consecuencias, como estreñimiento, mareos, fiebre, cansancio, entre otros.
La parte de la garra del diablo más efectiva es la raíz, aunque sus hojas y flores también tienen ingredientes activos. Aunque generalmente se la comercializa como extracto seco, comprimidos y gránulos homeopáticos. También puedes encontrarlo como pomada, especialmente indicada para dolores articulares.
Por supuesto que si consigues la raíz puedes usarla como tisana, sin embargo, su sabor es fuerte y amargo, por lo que está opción no es la más requerida.
Aunque es un remedio natural que no requiere receta, la dosis que debes tomar tienen ser indicadas por tu médico (su uso es muy común en la homeopatía). Para que te des una idea, generalmente se recomiendan 9 gramos al día de la raíz (en tres tazas al día), un promedio de 2 gramos del extracto y dos o tres comprimidos al día. Dependiendo de tus síntomas las dosis pueden aumentar para potenciar el efecto.
Los efectos secundarios son poco comunes, y generalmente están relacionados con dolores de cabeza y zumbidos de oídos. Sin embargo, si sufres úlceras gástricas o estás embarazada no debes consumirla, dado que aumentan las posibilidades de que sufras reacciones adversas.
Sin duda alguna, la propiedad sobresaliente del harpagófito es la de resultar un genial analgésico natural. ¿Quieres conocer algunas otras buenas opciones? No te pierdas estas.
