Ingredientes:
Preparación:
Pela las zanahorias, córtalas en trozos y colócalas dentro del vaso de la batidora. Añade allí también algunas hojas de lechuga (tres o cuatro serán suficientes) y la taza de infusión de manzanilla. Bate hasta que se integren todos los ingredientes y cuela bien, presionando para que se extraiga todo el zumo posible.
Luego no tendrás más que beber el resultante, el zumo de zanahoria y manzanilla, en ayunas, ya que de esa forma da mejores resultados. Verás que las acciones de estos vegetales pueden venir de gran forma para combatir esos reflujos de acidez tan molestos.