No existe evidencia que el consumo de infusiones de canela o de su aceites esencial durante el periodo de lactancia, no genere problemas en los lactantes, por lo tanto no se recomienda su consumo a las mujeres que se encuentren en esta etapa.
Los concentrados de aceites esenciales no están recomendados para aquellas personas que manifiesten algún tipo de problemas relacionados al alcoholismo, ya que la extracción de estos aceites se realiza en soluciones alcohólicas.