Básicamente, son dos las plantas que pueden usarse habitualmente para lograr combatir estos molestos tapones de oídos:
La manzanilla: Esta hierba, preparada en infusión, luego puede ser empleada en gotas para desobstruir los oídos tapados con cera. Simplemente tienes que aplicarte el preparado algo tibio y dejar que actúe antes de enjuagar. La manzanilla tiene buenas capacidades para corroer la cera y, a su vez, reducir inflamaciones que se puedan estar generando en el oído.
Aceite de oliva: Uno de los grandes «trucos de abuela» que existen para los tapones de cera en los oídos consiste en calentar levemente (para no quemarse después) un poco de este aceite y aplicarlo en gotas en la zona afectada. Tapa con un algodón y deja actuar, enjuagando muy bien posteriormente. Puede dar buenos resultados.
Todas estas soluciones planteadas deben ser tenidas en cuenta en caso de una obstrucción leve y siempre usadas con previa consulta médica. Siempre es lo correcto visitar a un especialista para que te ofrezca el diagnóstico adecuado y te practique una limpieza profesional para evitar complicaciones auditivas.