Composición del calabacín

El calabacín, cuyo nombre científico es Cucurbita pepo, posee dentro de su composición una gran cantidad de aminoácidos, los cuales son responsables de varias de sus propiedades medicinales. Dentro de los aminoácidos se destacan la alanina, arginina, cucurbitina, glicina, lisina y cistina, estos se encuentran principalmente en los frutos y las semillas.

La planta del calabacín, conocida también como calabacita, zapallito y zapallo italiano, contiene un importante aporte de vitaminas, principalmente la niacina (A) y tiamina (B). Las vitaminas del calabacín están concentradas en las flores, los frutos y las semillas.

El fruto del calabacín posee un gran valor alimentario, por cada 100 gramos de este fruto, aporta 24 gramos de calorías, 5,5 gramos de hidratos de carbono, 1,2 gramos de proteínas y 0,45 gramos de fibra, esta última ayuda de gran manera a la realización de la digestión.

El calabacín posee varios ácidos dentro de sus componentes, los que más se destacan por abundancia son el linoleico, el aspártico y el salicílico. Este último se encuentra concentrado mayoritariamente en las semillas.

El fruto de esta planta posee varias sales minerales, se destacan el calcio, boro, magnesio, potasio y el hierro. Estas sales minerales se encuentran tan sólo en el fruto del calabacín.