Si bien existen diferentes variedades de ginseng: ginseng blanco, ginseng rojo y ginseng marrón; todas comparten la propiedad contra el cansancio.
El ginseng tiene la propiedad de llenarte de energía, sin sobrexitarte. Incluso se ha probado la utilización de dicha planta en personas con fatiga crónica, obteniendo muy buenos resultados.
Popularmente, se considera al ginseng como un tónico natural. Incluso se la utiliza para el tratamiento natural de la astenia primaveral, una afección que afecta a millones de personas; y que se caracteriza por el cansancio extremo, fatiga y la somnolencia.
Por otra parte, el ginseng potencia la formación de endorfinas a nivel cerebral, aumentando la sensación de bienestar. Asimismo, mejora la circulación de la sangre a nivel cerebral con lo cual, los nutrientes y el oxígeno llegan mejor a las neuronas.
Si te sientes cansado y quieres reducirlo, en primer término debes ir a tu médico para que establezca la causa de este cansancio; y en segundo lugar puedes complementar el tratamiento médico con la infusión o té de ginseng.
