La lantana tiene pequeñas propiedades diuréticas, ya que estimula la eliminación de líquidos desde el organismo. Por esto es útil para el tratamiento de enfermedades como la cistitis, la nefritis o las infecciones urinarias. El consumo de infusiones de corteza u hojas de lantana podría ayudar a prevenir la aparición de cálculos renales.
Las hojas de lantana tienen propiedades antipiréticas, debido a esto las infusiones de este arbusto pueden resultar muy útiles para disminuir la temperatura corporal causada por alguna enfermedad.
Aplicado de manera externa, la lantana tiene propiedades antibacterianas, por lo que resulta muy interesante su aplicación en el tratamiento de heridas superficiales, ya que de esta forma se impide que estas se infecten. Debido a esta misma propiedad, la lantana se ha utilizado en el tratamiento de la conjuntivitis.