Cómo cuidar tus cactus
Los cactus son plantas únicas. Acostumbradas a medios secos, con espinas y particulares formas desde 1753 se clasifican en especies, en ese año fueron 32 pero poco a poco van apareciendo nuevas variedades, actualmente hay más de 150 géneros y 2000 especies.
Hay una clasificación general que los separa entre los Mammillaria (con forma de bola), Epyphyllum (forma aplanada), Cereus (forma de cirio). Su floración es hermosa, muy esperada y puedes encontrar una amplia variedad de colores, como naranja, rojo, fucsia, amarillo, entre tantos otros.
Estas plantas soportan climas secos ya que almacenan el agua en su tallo y al tener espinas en lugar de hojas evitan la evapotranspiración.
Su facilidad para adaptarse al clima seco los hace plantas ideales para quienes se olvidan un poco de la jardinería, sin embargo hay algunos cuidados básicos que debes tener en cuenta para que crezcan sanos y sin plagas ni enfermedades.
- Puedes reproducir tu cactus o cacto desde semillas, deben estar en prefecto estado para que tu ejemplar se desarrolle.
- También puedes adquirir una planta en cualquier vivero, es la mejor opción, ya que te ahorrarás el primer paso y tendrás una planta sana que puedes elegir.
- El sustrato debe permitir un correcto drenado para no ahogar al cactus.
- Debes ir trasplantando a medida que crece, pero… cuidado con las espinas. La mezcla más habitual es una parte de turba rubia, una de arena gruesa y otro carbón vegetal (ayuda a prevenir los hongos).
- Los cactus adoran el sol, colócalos en una zona donde puedas aprovecharlo. Si crecen en un lugar sin la luz necesaria correrán más riesgo de crecer a lo alto y estarán más propensos a enfermar, pero al sol crecerán a lo ancho y mucho más saludables.
- Su riego es necesario, sin embargo es mejor protegerlo de lluvias. Riégalo tu mismo(en lo posible recolecta agua de lluvias), es mejor hacerlo cada tanto (cuando veas que la tierra comience a secarse), que hacerlo todos los días.
- Otro truco interesante para saber cuando regarlo es colocar una maderita en la tierra, si la quitas y está húmeda y con tierra adherida, no hace falta regar. No uses los clásicos platillos debajo del cactus, acumulan humedad que ellos no necesitan.
- Si quieres una floración abundante y sana es mejor reducir el riego durante el invierno para permitir el reposo de la planta.
