Sus principios activos ayudan a disolver las grasas presentes en nuestro organismo, por lo que resulta indicada para aquellas personas que padecen de hipercolesterolemia y deben reducir sus niveles de colesterol en la sangre.
Las flores del crisantelo, tienen pequeñas propiedades antioxidantes, por lo cual la ingesta constante ayudaría a disminuir el riesgo de padecer enfermedades degenerativas, como las cataratas, algunos tipos de cáncer y los síntomas del envejecimiento.
Por otra parte, las inflorescencias del crisantelo tienen propiedades antibióticas, por lo que pueden ser utilizadas para el tratamiento de las heridas, ya que impediría que estas se infecten.
Los principios activos del crisantelo tienen propiedades medicinales hepatoprotectoras, por lo cual pueden ser utilizadas para tratar algunas enfermedades o situaciones que afecten al hígado.
Es importante mencionar que hasta el momento no se han encontrado efectos tóxicos ocasionados por la ingesta de esta planta, sin embargo es necesario consultar a un especialista antes de iniciar un tratamiento con el crisantelo, sobre todo si son condiciones serias que afectan a nuestra salud.
