Cómo cultivar arándanos en tu hogar
¿Te gustaría tener arándanos en tu hogar? Y sí, a quién no. Por eso mismo, no te vayas a perder estos maravillosos trucos para poder cultivarlos en tu propio hogar.
Los arándanos son una fruta característica de norteamérica, donde su consumo es muy común, sin embargo, en el resto del mundo comenzó a difundirse no hace mucho tiempo. Su delicioso sabor, versatilidad y propiedades los hacen un fruto que no debe faltar en tu dieta. Además, sus árboles embellecerán el lugar donde lo plantes, durante la primavera disfrutarás de sus hermosas flores acampanadas.
Lo primero que debes hacer es elegir la variedad de arándanos de acuerda a la zona donde vives, asesórate en un vivero o con especialistas para poder obtener arándanos más grandes, más deliciosos y en mayor cantidad. También es recomendable plantar un par de variedades para incentivar a la polinización cruzada.
Estas son algunas de las variedades y sus características:
- Highbush (Vaccinium corymbosum): Son los más comunes ya que esta variedad es de bayas grandes, de árboles altos de hasta 8 metros de altura. Lo mejor es ofrecerle un clima cálido y húmedo, pero principalmente con poco frío.
- Lowbush (V. angustifolium): Soporta el frío, inclusive temperaturas bajo cero. Sus bayas son dulces y pequeñas.
- Ojo de conejo (V. ashei): Soportan más variedades de suelos, y resultan árboles de hasta diez metros.
Algunos trucos para cultivar arándanos
- Como en todo cultivo también es muy importante tener el suelo ideal, los arándanos necesitan un suelo particular, aireado y húmedo, con hummus y ácido. Lo mejor que pueden hacer es proporcionarle un pH entre 4 y 5.5, con mezcla de azufre.
- Llegada la hora de plantar realiza hoyos para poner las plantas, rellénalos con hojas compostadas y hummus.
- Luego de la siembra es importante que extiendas una capa de mantillo orgánico, puede estar compuesto de paja, hojas secas trituradas, vituras de madera, entre otros. Su función será evitar que malas hierbas y mantener la humedad de las raíces.
- El riego debe ser abundante y lo mejor es realizarlo con una manguera o por goteo para evitar que las raíces se pudran.
- La planta de arándanos no necesita muchos cuidados, no deberás podarla hasta que cumpla los tres años y durante ese tiempo sólo deberás evitar que se asienten malas hierbas. Una vez que comienza su etapa de podado deberás hacerlo siempre a fin del invierno para eliminar las ramas viejas y darle lugar a las más jóvenes.
- La cosecha debes realizarla cuando veas que las bayas están azules y del tamaño adecuado, también puedes apretar alguna para ver que si ya está madura. Si tienes muchos árboles su producción será mucho mayor a lo que consumes, puedes regalarlos, comenzar un emprendimiento vendiéndolos, deshidratalos, congelarlos o hacer dulces con ellos.
